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Calificada por la crítica norteamericana como «obra maestra», Pastoral americana es la crónica lúcida y despiadada de la caída del entusiasmo, del derrumbamiento de la fe de toda una generación.
La novela en la que se basa la película de Ewan McGregor, American Pastoral.
Seymour Levov, el Sueco, atleta mítico en la escuela secundaria, afectuoso padre de familia, trabajador infatigable y acomodado heredero de la fábrica de su padre, llega a la mayoría de edad en la Norteamérica próspera y triunfante de la posguerra. Él sólo quiere hacer las cosas bien y llevar una vida tranquila. Pero la historia es más fuerte que él y le arrastra sin remedio cuando su hija Merry se ve involucrada en un acto violento contra la guerra de Vietnam. Las devastadoras consecuencias alejarán al Sueco de cualquier esperanza de felicidad o coherencia espiritual.
Philip Roth nos sumerge en esta novela, ganadora del Premio Pulitzer en 1998, en la década más explosiva del siglo XX: los años sesenta. Y se muestra en plena forma, con la prosa contenida y la sutileza intelectual que le caracterizan a la hora de retratar las falsas promesas del sueño americano.
Calificada por la crítica norteamericana como «obra maestra», Pastoral americana es la crónica lúcida y despiadada de la caída del entusiasmo, del derrumbamiento de la fe de toda una generación.
La novela en la que se basa la película de Ewan McGregor, American Pastoral.
Seymour Levov, el Sueco, atleta mítico en la escuela secundaria, afectuoso padre de familia, trabajador infatigable y acomodado heredero de la fábrica de su padre, llega a la mayoría de edad en la Norteamérica próspera y triunfante de la posguerra. Él sólo quiere hacer las cosas bien y llevar una vida tranquila. Pero la historia es más fuerte que él y le arrastra sin remedio cuando su hija Merry se ve involucrada en un acto violento contra la guerra de Vietnam. Las devastadoras consecuencias alejarán al Sueco de cualquier esperanza de felicidad o coherencia espiritual.
Philip Roth nos sumerge en esta novela, ganadora del Premio Pulitzer en 1998, en la década más explosiva del siglo XX: los años sesenta. Y se muestra en plena forma, con la prosa contenida y la sutileza intelectual que le caracterizan a la hora de retratar las falsas promesas del sueño americano.